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Estamos
en otoño, época del año en la que tradicionalmente se plantan los nuevos
frutales. Hay muchas formas de plantar árboles frutales, dependiendo del espacio del jardín o del huerto, aunque últimamente plantar frutales en espaldera va tomando forma, ya que se consiguen buenos resultados en las explotaciones agrícolas, y en un jardín puede servir para delimitar zonas o para crear un efecto decorativo muy original.
Si en tu zona los fríos son muy intensos o han empezado las nevadas, habría que posponer la siembra de frutales nuevos, hasta el final del invierno, cuando ya el clima empiece a ser más benigno. Estos consejos están sobre todo dirigidos a los árboles frutales que se suelen plantar en estas fechas: “a raíz desnuda”.
Si en tu zona los fríos son muy intensos o han empezado las nevadas, habría que posponer la siembra de frutales nuevos, hasta el final del invierno, cuando ya el clima empiece a ser más benigno. Estos consejos están sobre todo dirigidos a los árboles frutales que se suelen plantar en estas fechas: “a raíz desnuda”.
Jardines pequeños ideales para frutales en espaldera
Si
tienes un jardín pequeño, o un huerto pequeño y te apetece tener árboles
frutales, quizás la mejor elección para que no ocupen demasiado espacio, es
guiar su crecimiento de manera que sus ramas tengan formación de espaldera.
Dando una formación de espaldera a los árboles frutales, conseguimos reducir el
porte natural del árbol, adaptándose de forma idónea a un espacio pequeño.
¿Qué árbol frutal puedo elegir?
Hay
muchos árboles frutales que pueden ser cultivados y orientados para crecer en
forma de espaldera, aunque los que mejor se van a adaptar a esta formación, son
los que están injertados en patrones enanizantes.
Si el
patrón sobre el que está injertado el árbol frutal, es un patrón típico nos va
a obligar a realizar podas más drásticas para mantener la estructura de la
espaldera, o por el contrario utilizar una espaldera mayor.
Algunos
de los árboles frutales en espaldera más utilizados: Melocotonero,
nectarina, albaricoquero, manzano, membrillero, peral, caqui y por último uno
muy tradicional y que vemos habitualmente en los campos de Castilla: la parra.
Preparación del lugar de la siembra
Una vez
que hemos elegido el árbol frutal que nos conviene, también tendremos que tomar
la decisión de elegir el estilo de espaldera que nos gustaría para nuestro árbol
frutal. Normalmente se suelen utilizar dos, palmeta y candelabro. Si no tienes
mucha experiencia, creo que lo más lógico es elegir palmeta, requerirá menos
trabajo por nuestra parte.
Antes
de nada, debemos preparar todo lo que vamos a necesitar, tanto el terreno al
que deberemos preparar convenientemente de mantillos, fertilizantes, etc. Como
también debemos preparar todo lo necesario para sujetar la estructura del árbol:
alambres, postes, etc.
¿Como se podan los frutales en espaldera?
Si
queremos conservar los frutales en espaldera, tenemos un gran
trabajo por delante, ya que como es lógico, el árbol tenderá a crecer de forma espontánea,
formando copa.
Tenemos
que comprar ejemplares jóvenes, normalmente de 1 o 2 años, que tendrán menos
ramas y las que tienen serán más flexibles. Dependiendo si queremos hacer una
formación en palmeta o candelabro, nos será más fácil de conseguir, con
ejemplares jóvenes.
Conseguir
la forma deseada, normalmente lleva consigo un proceso de unos 4 años de poda
de formación. A partir del cuarto año, sólo necesitamos realizar las podas que
el árbol frutal vaya necesitando.
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